Una disciplina que impulsa a romper límites físicos y mentales, desarrollando habilidades que van más allá del movimiento.
Se enfoca en el fortalecimiento de la flexibilidad, el equilibrio, la fuerza y la coordinación, pilares esenciales para un desarrollo físico completo.
Puede practicarse de manera personal, como un reto propio, o en dinámicas grupales que fomentan la motivación, el trabajo en equipo y la sana competencia.
A través de distintos niveles de complejidad, los participantes adquieren mayor seguridad, agilidad y resistencia, aprendiendo a confiar en sus capacidades y superar desafíos progresivos.